Harder...

Yacia desnuda en medio de esta gran cama gris, parecia diminuta por lo alto de la paredes y lo profundo del techo grotesco y blanco. Estaba segura en su interior bizarro, pensamiento oscuro, sueños provocadores. Hablaba con su novia, ella como ex estaba permitida solo a respirar silenciosamente, como siempre. Se levanto cual caltapulta en plena guerra, arqueo sus rodillas, gateo hasta la esquina de la cama donde se encontraba. Acaricio su pelo, beso su cuello. Ella es adicta a los cuellos desde aun antes de poder saber que se podian usar de este modo, tambien le gustaban los ombligos. Ahora los usa para tentar, establcer el deseo, ocultar temores. Desglosa con su lengua toda caricia deseada, concentra sus esfuerzo y logra que caiga el telefono. Del otro lado la novia oye el chirrido de la pata de una cama, y como su pareja grita y jadea como nunca antes lo habia escuchado, en ninguna de sus sesiones diarias, ninguna... El sonido masturba sus pensamiento, decae, cierra el telefono. Se dirije de forma automatica por el pasillo angosto de su casa, abre la puerta marron, camina unos pasos y sube las escaleras rojas, opacas por la edad, llega al techo, cierra los ojos, cae... De vuelta a la habitacion, terminan, ella se dirige al baño, se sienta en el sanitario frio, sonrie con la puerta abierta, la pareja la mira, se recuesta, da un copazo al cigarrillo que segundos antes habia prendido, dirige su mirada a la ventana, ve algo que cae en el edificio del frente, mira hacia el techo blanco, se pierde entre sus grietas...