let it go

Hace frio en esta habitacion de paredes moradas, con retratos de cada cumpleaños hasta el numero 16, diplomas de unos 15 cursos de idiomas, musica, danza, artes plasticas y marciales, y unos cuantos afiches de bandas o artistas como Slipknot, The Verve, Nirvana, Korn, Mika, Norah Jones y Tegan and Sara, actores y actrices como James McAvoy, Katherine Moening, Jake Gyllenhaal y Kat Dennings. Sobre la cama naranja se encuentra ella de espalda con su largo vestido verde, una parte se desliza por su piel, su cama, hasta el suelo negro. Tiene la mirada fija al techo tambien negro con estrellas luminicas, no hay luces, solo un pequeño rayo se abre paso por la ranura entre las cortinas violetas que saca a relucir el maquillaje corrido en sus mejilla. En su mano una rosa teñida de azul. Suena su telefono celular, por el timbre sabe que es una llamada de alguien especial pero no tanto como para contestar. En su mente juega cartas con su gato mientras fuera llueve y sufren los angeles caidos. Turú. Le ha llegado un correo electronico. El monitor ahora ilumina su rostro por completo, sus ojos azules casi sin brillo. De lejos lee, es de la misma persona que segundos antes llamaba. Se levanta lentamente, como midiendo sus pasos, se dirige al baño, posa la rosa en el lavamanos, se dedica a remover el maquillaje, como si fuese una ceremonia sigue el curso de las lagrimas secas, retoca de forma mas sencilla, asi no se corre de nuevo. Lava sus manos, las seca, toma la rosa mientras mira su reflejo en el espejo, luce casi como si no estuviese melancolica, sus ojos aun pierden su brillo. Voltea, camina con mas seguridad, se para frente a la cama, fuera suenan perros, su gato despierta y utiliza las piernas de ella para acariciar su cuerpo, ella coloca la rosa en medio del lecho, se arrodilla, pasa su mano suavemente por la cabeza del gato, se pone de pie y termina de leer el e-mail que anteriormente le habian mandado. Lo lee, solo es un ¨Where r u hon?¨de la princesa cicatrizada, en este aparece una foto de la princesa con el caballero de corazon frio y la doncella lujuriosa. No se puede odiar. Cierra la ventana del mundo artificial, y toma su bolso para dirigirse al mundo de las apariencias. Va a pie, disfrutando de la enorme luna que reluce entre la nubes grices culpables de la lluvia. Dicen que parecia un fantasma, que su camino pudo haber durado, siglos, decadas, años, meses, semanas o simplemente dias y dias. Algunos aseguran que se deshacia, puedo haber sido solo segundo, fueron solo unos 16 minutos. Llego a un edificio perturbador, cuadrado, azul palido en contraste con el pasto. Entra esta empapada, creen que feliz, mas feliz que nunca. Abraza a la princesa, da una bofetada al caballero y arruina el traje de la doncella. Todo esta decorado de rojo y blanco, las mesas son redondas y la banda de su hermana toca. Mira fijamente al escenario, sube, besa al baterista de traje de un tono verde mas oscuro que el suyo. Lo toma de la mano derecha, bajan por la escalera izquierda, ella arroja sus zapatos, corren entre la multitud boquiabierta, salen del salon. A pocos metros, en el parque, ya con la lluvia en pleno apojeo, se detienen bajo un arbol tan grande como solo se ven en retratos de paisajes soñados. Se toman de las manos, se miran como complices, sonrien caprichosamente, cierran los ojos, inclinan la cabeza hacia atras. Una luz verde destaca este color en toda la vision. Ellos la miran. *** La doncella corre con lo que queda de su vestido rosa por todo el campo de soccer. Llora. Rojo.